jazzborondon: enero 2008

jueves, 31 de enero de 2008

Ofrecen música digital para oídos exigentes

Ofrecen música digital para oídos exigentes
30 Enero 2008
Actualizado: 12:21 AM hora de Cd. Juárez
Hiawatha BrayNew York times News ServiceBoston– La venta de música por Internet ofrece millones de canciones de todo género, desde la ópera, pasando por el hip-hop hasta canciones folclóricas palestinas. Pero es difícil encontrar música en línea que suene bien en un reproductor de mil dólares.Sitios de música en línea como Apple y Amazon.com utilizan tecnologías de compresión digital para reducir el tamaño de los archivos de audio, haciéndolos más sencillos de almacenar y descargar. Pero la compresión ‘ahueca’ la música, ya que elimina muchos detalles auditivos apreciados por los amantes de la música de hueso colorado. Es por ello que algunos audiófilos exigentes no quieren exponer sus oídos a las canciones de hoy en día y están solicitando algo mejor.“Personalmente, no compraría ni descargaría nada de iTunes, Amazon, etcétera”, señaló Ed Sawyer, un desarrollador de aplicaciones web de 38 años de Dover, New Hampshire. Está dispuesto a reconsiderar su postura pero sólo si los sitios de descarga ofrecen más música en formatos que no mermen la calidad de audio. “La alta fidelidad en las descargas es algo crucial en mi mundo”, añadió.Un puñado de sitios de música digital, incluyendo Magnatune, MusicGiants y AIX Media Group, están respondiendo a un mercado de descargas de audio que igualan, y en algunos casos superan la calidad de los CDs.El audio de un CD estándar se almacena en un formato digital llamado WAV. Pero un álbum completo ocupa entre 600 y 700 megabytes de espacio en el formato WAV. Al inicio de la década, cuando despegó la música online, muchas personas aún tenía discos duros relativamente pequeños y conexiones lentas a internet, haciendo tediosa y costosa la descarga.Llegaron los métodos de compresión como el MP3 y el AAC. éstos pueden comprimir archivos a una décima parte de su tamaño original, y esto tiene un costo. El sistema identifica las frecuencias de sonido que muchas personas apenas perciben y los borra. El resultado es decente si escuchamos música a través de unas bocinas baratas o de audífonos. Pero muchas personas han descubierto que los MP3 y los ACC no tienen la riqueza ni la complejidad de un archivo de audio WAV. Así que siguen comprado CDs.Para aquellos que necesitan fidelidad en su música, hay algunos sitios especialidados en internet.Magnatune, por ejemplo, es un sello independiente que ofrecer álbumes de música clásica, rock, y folk a precios tan bajos como 5 dólares. Los clientes pueden descargar cada álbum varias veces, en múltiples formatos. Los formatos de MP3 y AAC están disponibles, pero los usuarios pueden conseguir archivos WAV sin comprimir.éstos toman más tiempo para descargarse, pero con las conexiones de banda ancha y la gran capacidad de almacenamiento en los discos duros de hoy en día no es tanta la molestia. El servicio de MusicGigants es más el de un distribuidor de música. Tiene la licencia de los derechos para ofrecer descargas musicales de sellos importantes como EMI. AIX es más apasionado con la calidad de audio. Su sitio iTrax ofrece álbumes de rock, jazz y música clásica en 18 formatos, en un rango que abarca desde MP3s hasta versiones en seis canales con sonido surround (envolvente) que excede por mucho el estándar de calidad de un CD.

Pedro Guerra y Los Sabandeños - Cathaysa

Emblemática, gran canción de pedro Guerra basada en un poema de su padre Pedro Guerra Cabrera sobre Cathaysa, la niña aborigen raptada por los invasores castellanos en una incursión por Anaga, y vendida posteriormente como esclava.

La gueldera de Acentejo
y el engodo en Candelaria.

Primero llegó la cruz
y después las espingardas.

El valeorso Bentor,
se deriscó por Tigaiga
y callaron los verdinos
y enmudecieron las chácaras,
y sangraron los mocanes
y se secó la cebada
y las abejas se fueron
y se espantaron las cabras

No quedó sino el coraje
de una isla y una raza
y una infinita querencia:

nacer, vivir y morir,
sin cadenas castellanas.

Se la llevaron los invasores,
cuando venia de la montaña,
con su carguita de tilo y brezo,
camino abajo, por la quebrada.

Se la llevaron de anochecida,
a la guanchita de Taganana
y el manojito de leña seca,
desbaratado quedo en Anaga.

Juguete de algún marqués
menina de alguna dama
sierva de grandes señores
en algún lugar de España
Cathaysa la niña guanche
no verá más Taganana.

Se la llevaron los invasores,
cuando venia de la montaña,
y el camininito se fué cerrando
de mala yerba y de telarañas.

Un gran silencio creció en la cumbre,
un aire helado bajo a la playa,
asi de mudo se quedo el monte,
asi de fria se quedo el agua.

Juguete de algún marqués
menina de alguna dama
sierva de grandes señores
en algún lugar de España
Cathaysa la niña guanche
no verá más Taganana.

Cathaysa, la niña guanche,
no vera más Taganana